sábado, septiembre 16

donde fueron a parar

Íbamos por Passeig de Gràcia tras una emergencia "zapatística" por la inminencia de un casamiento. A y yo socorriendo a L ante tal problema.

Dispuestas a cruzar la calle, esperando en el semáforo, del otro lado de la calle veo a alguien que conozco. Cruzamos y nos cruzamos.
- ¿Uruguayas, vieron quien pasó? - les pregunto a mis compañeras.
- No quién, dónde.
- Allá - señalando en su dirección. - Es Jaime Ross.
- No, que va a ser.
- Si, les juro que es. ´

Ahí estaba, bien blanco como recién llegado del invierno, observando detenidamente La Pedrera de Gaudí.

- No, es- insistían.
- Vayan, párense al lado y lo escuchan - y allá fueron las sanduceras. Se pararon al lado de él como tantos turistas, haciendo que miraban el edificio mientras lo miraban a él. Ni se dio por aludido.

- No es - volvieron diciendo - está muy raro. No es.

Yo estaba segura que era, no era alguien que había visto una vez, era Jaime Ross, además lo había escuchado hablar cuando nos cruzamos. Así que ahí estuvimos, en la esquina de Passeig de Gràcia y Provença, largo rato, discutiendo.

- Vayan a preguntarle, si es, todo bien, y si no es, el tipo las va a mirar con cara de no entender y les va a preguntar "¿quién?".

Yo por supuesto, haciendo gala de mi miedo al ridículo más grande, me quedé en la esquina, mirando la hazaña. Allá fueron, se acercaron, conversaron unos segundos, se rieron y volvieron contentas.

- ¿Y?
- Sí era.
- ¿Qué les dijo?
- Nada, A le preguntó si era Jaime Ross, él se rió y nos dijo que sí.
- Sí, nos preguntó si éramos de allá, de dónde éramos, así que las dos dijimos "de Paysandú", así a coro.
- A ya se volvía y yo le pregunté si estaba de paseo o iba a tocar. Nos dijo que estaba de paseo y que a lo mejor volvía el año que viene a tocar, que si estábamos acá estábamos invitadas.

Así que bueno, después seguimos caminando como unas tres horas más en busca del zapato perfecto, analizando la situación y riéndonos de nosotras.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Sí, sí, sí
que pasa el tiempo

Anónimo dijo...

A propósito:
sí, sí, sí, que pasa el tiempo
es mucho mejor que:
el tiempo pasa, nos vamos poniendo viejos

Chiquilín de Bachín dijo...

Uruguayos
Uruguayos
¿dónde fueron
a parar,
por los barrios
más remotos
de Colombes
o Amsterdam?