viernes, agosto 15

autoestima

Hoy no era un día maravilloso para la autoestima cuando salí de casa pero parece que el sol hace que las cosas cambien. En mi trabajo de la mañana vino un compañero que no veía hace tiempo y me dijo "qué flaca que estás", a lo que otro compañero al lado le dice "¿por qué no le decís que está buena mejor?". Cabe aclarar que el primer compañero suele hacer ese tipo de comentarios por eso la instigación del segundo, pero igual.

Salgo de ahí caminanado hacia mi casa cuando desde un edificio en construcción un obrero me aplaude y para completarlo me cruzo con el Pitufo Lombardo y el Pinocho Routín (músicos uruguayos, murgueros, a los que ya hice varias veces referencias en este blog) y me miraron de arriba a abajo.

Sé que todos estos actos pueden ser vistos por una feminista como ofensivos por ser observada como un pedazo de carne. A mi me levantaron el espíritu y ahora me siento linda. Será por un rato nomás pero la autoestima agradecida.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Mirá que sos dura de entender!!
Cuántas veces te dijeron que eras linda y cuantas te miraron por la calle?
No sabés que lindo es mirarte...

Anónimo dijo...

Señorita, no camine bajo el sol, con este calor los bombones se derriten...

dragona dijo...

Soy feminista pero que el pitufo me mire de arriba abajo me llenaría de felicidad igual, cómo te envidio, jaja! Me encanta tu manera de escribir, retomá el blog por favor! (lo descubrí hace poco), saludos desde bs as...