jueves, febrero 14

radio

Mis tres años en Barcelona me hicieron valorar más aún la costumbre de escuchar radio. Creo que en América Latina tiene una dimensión mucho mayor que en Europa, por ejemplo. Y aunque mis universos empíricamente comparados sean Uruguay (sí todo el país no sólo Montevideo) y Barcelona, algunas conversaciones con amigos repartidos por América respaldan la cuestión.

Me levanto, prendo la radio y mientras voy desayunando, bañándome y preparando todo para salir me voy enterando cómo está el tiempo, las noticias y riéndome un rato. Claro, escucho radio hablada, sobre todo de mañana. También cuando salgo a la calle. Me conecto los auriculares de la radio a las orejas y salgo a enfrentar el mundo. Sí señores, no tengo ni mp3, ni ipod, y totalmente por decisión propia. Todos estos aparatejos no incluyen radio AM. Ya sé que puede sonar raro para algunos, pero por estos lados la AM sigue siendo muy importante y me resisto a quedarme sin esa alternativa.

Si bien desde hace un año pasé mis mañanas al periodístico de FM No toquen nada, sigo recorriendo el dial para escuchar las transmisiones de carnaval, a Dolina, 13 a 0 y algunas otras cosas.

Tres años sin radio fueron suficientes para mi. Que vivan los sonidos que estimulan los sentidos...

3 comentarios:

Unknown dijo...

Empecé a escuchar am cuando vine a MVD, a los 18. Por casualidad puse una y me gustó y ahí se me quedó el dial. Y después me puse a trabajar ahí y nunca probé otra... Y ahora estoy como los que se casan con el primer novio... preguntándome... ¿cómo serán las otras?

Anónimo dijo...

Pah, yo nunca escucho radio =S no me siento uruguaya ahora xDDD toodo el día escuchando mp3

Qué lindo blog che, saludos

Anónimo dijo...

Totalmente. Yo en montevideo, los domingos escuchaba trece a cero en el walkman y eso de de fulbo no cazo una , no cazo.